Esta es la historia de... ¡¡Maldita droga!!

Hola Ana

Realmente esta no es mi historia, si no la de mi mejor amigo Rodrigo, lamentablemente Ana él no te la puede contar por eso soy yo quien te cuente lo que le pasó y como llegó a tomar la última decisión de su vida...

Rodrigo era un chico alegre y lleno de vida, de todo nuestro grupo de amigos era el mas divertido, siempre tenia una buena palabra, un buen gesto, una sonrisa agradable, siempre estaba cuando lo necesitabas y nunca decía que no... pero todo eso cambio cuando empezó la universidad.

El quería ser doctor y por eso fuimos a universidades diferentes, estábamos a 200 km de distancia pero eso no era un impedimento para vernos y mantener el contacto. De repente después del segundo año de carrera, sin darme cuenta un día la cosa cambió y ya no lo veía en vacaciones o puentes, lo llamaba y su compañero de piso me decía que no estaba, cuando le mandaba mensajes no me respondía, su madre me preguntaba si yo sabía que le pasaba a su hijo que lo notaba muy raro y ya casi apenas llamaba a casa. Yo Ana no sabía que estaba pasando y es por eso que decidí ir a verle.

Cuando llegué me encontré a una persona completamente diferente a la que había compartido mi vida durante mis 25 años. Estaba muy demacrado y con un aspecto físico deteriorado, al verme esperaba que me diera un abrazo y se alegrara, pero no fue así. Lo primero que me dijo fue ¿ Que haces tu aquí? !! Vete yo no te he pedido que vengas !! Me quedé a cuadros Ana, no lo entendía y él no me explicaba nada, solo me decía que me fuera y así lo hice. Me marche muy enfadado y a la vez decepcionado, no me esperaba nada de eso y me fui sin insistir mas y ahora me arrepiento... sigue

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Después de eso, no supe mas nada de Rodrigo hasta que me llegó la triste noticia de que había fallecido de una sobredosis de heroína. ¿ Como? ¿ Rodrigo? ¿ Con drogas? !! No podía ser !! Sentí una impotencia muy grande, no podía creer que eso fuera verdad y sin dudarlo me planté en casa de sus padres para saber mas de lo que le había sucedido a mi gran amigo y allí su hermana me lo confirmó, Rodrigo era drogadicto y lo encontraron tres días después de su muerte con una jeringuilla clavada en su brazo.

En su funeral conocí a Iñigo, su compañero de piso, al preguntarle como habían sido sus últimos días me sorprendí aun mas con lo que me contó. Resulta que a los dos meses de llegar Rodrigo a la universidad, se topó por desgracia con un grupo de chicos indeseables que le hicieron la vida imposible, tanto es así que dió varios partes en dirección para que lo dejaran de molestar, pero eso fue peor y no se lo perdonaron. A los seis o siete meses después de eso conoció a Lidia, una chica muy mona con la empezó una relación pero de la que yo no tenia constancia. Esta chica le daba a las drogas y poco a poco lo fue introduciendo en ese mundillo. Sin darse cuenta estaba tan enganchado a las drogas que dejó los estudios y todo el dinero lo empleaba en drogarse con su circulo de amistades que eran básicamente gente de ese mundo.

Pasados unos meses Iñigo, que si sabía la historia de los chicos que lo acosaron, se encontró al cabecilla de la banda con la novia de Rodrigo dándose el lote en un parque cercano a su casa y se lo comunicó enseguida a mi amigo. Destrozado no sabía que hacer y recurrió a lo mas fácil, drogarse para olvidar, pero cuando la droga ya no le hacía el mismo efecto que antes, comenzó a probar drogas mas duras, hasta que llegó a inyectarse heroína en vena. Ese fue su trágico final.

Iñigo está convencido de que todo fue un complot para vengarse de mi amigo, aunque no tenemos pruebas para demostrar que ellos fueron los causantes de esta tragedia, después de saber todo lo que se hoy en día y mas sabiendo que Lidia era novia anteriormente del cabecilla de la banda y que mucha gente me ha dicho que se veían cuando salía con Rodrigo,no me cabe duda de que algo tuvieron que ver en la muerte de mi amigo.

Quiero compartir esta historia Ana, para que los jóvenes no caigan en ese mundo, se empieza por poco y se termina en un ataúd bajo tierra, la droga no es nada buena y aunque muchos penséis que lo controláis no es así.

Quiero mandar un beso enorme a mi gran amigo Rodrigo, que desde el cielo nos cuida !! No te olvidamos !!

Gracias Ana.

Si quieres que tu historia sea la próxima en ser publicada en Las Confidencias de Ana, envíala a analcda@gmail.com. -->