Esta es la historia de... Una decepción.

Hola Ana, he decidido escribirte esto porque me gusta mucho tu sección.

Cuando yo tenía 18 años me enamoré perdidamente de un chico que veraneaba en el pueblo de donde era yo. El tenía 25 años y para mi era lo mejor que existía, con simplemente verlo mi corazón daba un vuelco.Yo no me atrevía a decirle que me gustaba por miedo a perderle como amigo; ya que para mi estar a su lado y ser su confidente ya era motivo de alegría.

Hasta que un buen día el me dió la sorpresa de mi vida, me pidió salir como novios, yo no me lo podía creer la verdad era un sueño hecho realidad. Al principio era detallista y cariñoso pero a medida que pasaban los días y se acercaba el día de marcharse a su casa, se hacía más frío, menos cariñoso y sobretodo no quería quedar conmigo y casi ni me hablaba. No entendía ese cambio de actitud hacía mi, cuando había sido él que había dado el paso para estar juntos, pero mis dudas pronto tendrían una respuesta muy dolorosa para mi...

Un día le pregunté que le pasaba, porque no me hablaba y si tanto me quería como me decía podía confiar en mí y decirme que si estaba así era porque se iba a marchar, pero no Ana, ese día me llevé una gran desilusión. Mi sorpresa fue que él me evitaba porque se sentía culpable de engañarme ya que la amistad que teníamos la traicionaría, yo no entendía nada así que le dije por favor que me lo explicara... sigue

Empezó a sincerarse conmigo, me dijo que sus amigos le dijeron que se me notaba mucho que a mi me  gustaba y que porque no empezaba a salir conmigo, él al principio dijo que no ya que solo me veía como una amiga, pero los continuos piques de sus amigos y la falta de personalidad que demostró tener, hicieron que aceptara hacer una apuesta para pedirme salir y si estaba conmigo hasta que se marcharan ganaría 50 euros.

En ese momento se me vino el mundo abajo, ¿Como a la persona que tanto quería me partió el corazón sin importarle mis sentimientos? No daba crédito a lo que estaba escuchando, era surrealista total, ¿ Donde quedaron los sentimientos? ¿ Las caricias? ¿ Sus palabras de amor? ¿ Donde quedaba nuestra amistad?

Desde aquel verano el sigue viniendo a veranear aquí pero yo no quiero ni hablar con el. Aún no entiendo como me traicionó por 50 miserables euros.

Después de esto me costó mucho confiar en los chicos, pero gracias a Ismael, el chico con el que estoy ahora y con el que me hace sentir feliz día a día, lo he superado y he vuelto a confiar porque él . consigue con una sola palabra, un solo gesto, una sola mirada... borrar todo el sufrimiento de mí historia pasada.

Si quieres que tu historia sea la próxima en ser publicada en Las Confidencias de Ana, envíala a analcda@gmail.com.