Esta es la historia de... Mi profesor y yo

Hola Ana aquí te traigo mi historia. Es un poco larga, pero es preciosa. ¡¡VALE LA PENA!!

Todo empezó cuando yo cursaba 4º de la ESO en un instituto nuevo, en aquel entonces yo tenia 17 años, porque había repetido el curso anterior. Yo siempre he sido una chica bastante atractiva, alta, delgada, medio rubita... pero nunca mi apariencia se me subió a la cabeza.

Empezó el curso. Yo era la nueva, en un instituto donde se conocían todos. Todo eran caras nuevas y profesores nuevos para mi. Yo siempre me había relacionado con gente adulta, siempre he sido muy madura para mi edad, y mis compañeras de clase, pues no eran un buen perfil, el primer día ya me di cuenta que no encajaban conmigo, ya que las encontraba muy chicas. 

Llegó la primera clase de educación física. Pues la verdad es que el profesor era joven, tenia 28 años, y era guapo y musculoso. Enseguida las chicas de mi clase empezaron con tonterías y piropos para llamar su  atención, yo me mantenía al margen, y incluso me saltaba la clase porque odiaba esa asignatura. Digamos que por aquel entonces era un poco rebelde. 

Pasaron un par de meses desde que empezaron las clases. Y Javi, así se se llamaba el profesor, me citó para preguntarme el por qué de mi ausencia, ya que si no hacia las pruebas necesarias no podría evaluarme y suspendería. Le dije que como en las demás iba bien, no me importaba para nada dejar sus clases de lado. Lo que le enfadó muchísimo. 

Yo decidí ir a clases y él siempre se reía, cuando las demás hacían las tontas para captar su atención, y me miraba a mí porque sabia que también me daba cuenta. Poco a poco empezamos una complicidad con las miradas. Ya que él se dió cuenta enseguida de mi grado de madurez respecto a las demás. Incluso mientras estaban el resto en las duchas, siempre me preguntaba por los planes del fin de semana, y otras cosas.

Bueno, pues ya estábamos a mitad de curso. Cuando, un fin de semana, después de los exámenes  decidí salir de fiesta con mi prima, y para mi sorpresa, me encontré a Javi con sus amigos, haciendo botellón en la misma acera que yo. Claro que le saludé, y estuvimos allí hablando. Luego yo y mi prima nos fuimos dentro de la discoteca, y les perdimos el rastro. Pero a la madrugada saliendo de la discoteca nos encontramos otra vez. Y no se como nos terminamos dando los teléfonos  Yo asistía a clase normal, y siempre normal con él.

Volvimos a coincidir, otra vez dos semanas después en la misma discoteca, pero esta vez, mi prima y yo si nos quedamos haciendo botellón con ellos. Y luego estuvimos con ellos dentro también bailando y pasándolo bien. Yo y Javi nos pasamos la noche hablando, incluso salíamos a la terraza juntos, y continuamos hablando. Sus amigos se dieron cuenta de que pasábamos la noche muy juntos, y empezaron con las bromitas, de que si alumna y profesor, que si tal y que si cual. A mitad de la noche, salimos otra vez al coche, íbamos ya todos contentitos, y los roces aumentaban, yo estaba apoyada completamente con Javi, y empezaba la cosa a ponerse cariñosa. Llegó el momento de marcharse, y vimos que había control de la guardia civil. Para no jugársela  un amigo de Javi nos invitó a que fuéramos a su chalet a dormir, ya que no hacia falta coger carretera y estaba cerca de la discoteca. Y así lo hicimos... 

Llegamos al chalet y nos pusimos todos en el comedor, ya estábamos cansados y la mitad nos quedamos dormidos. Yo me quede durmiendo en el mismo sofá que Javi. Cuando nos despertamos algunos se fueron, mi prima seguía dormida, y yo me quedé hablando a solas con Javi en el comedor, fue en ese momento cuando no se como, nos terminamos dando un beso en la boca. Javi se separó y se me quedó mirando y riendo. Cuando mi prima se despertó nos fuimos cada uno a su casa... sigue

Yo no me creía lo que había pasado, pero tenia que verle al día siguiente en clase, e iba a ser un poco incómoda la situación.  Así es que al comenzar la clase Javi me habló como siempre, y yo me puse sonrojada. Los días pasaban, y Javi y yo continuábamos hablando por teléfono  y nos dimos cuenta de que algo estaba pasando. Ese mismo fin de semana, quedamos en ir a cenar, y la verdad es que me encantaba, me sentía super protegida, pero era como algo prohibido, ya que no estaría bien visto en el instituto. Esa noche dormimos juntos, y al despertarnos decidimos ocultarlo, para que no se enteraran en el instituto. El curso terminó. Y llegó el verano.

Lo pasé con Javi, todo era perfecto, cada día nos amábamos más, me presentó a su familia, sabiendo que yo era su alumna, y todos nos apoyaron en que siguiéramos adelante. 

Volvió a empezar el nuevo curso. Esta vez, yo ya no tenia a Javi de profesor, pero nos veíamos de todas formas por los pasillos. Yo estudiaba 1º de Bachillerato. Y en parte era divertido cruzarnos como si nada. Pero se hacia bastante pesado. Me hacia sentir super especial, y me trataba como una princesa. Yo ya había cumplido los 18 años, cuando un día me di cuenta que tenia un retraso de 15 días  Javi me compró un test de embarazo, y para nuestra sorpresa yo estaba embarazada. Se lo decimos a nuestros respectivos familiares, mi madre aceptó la noticia con alegría al igual que sus padres. Yo y Javi hacíamos vida en su casa, ya que el  vivía sólo, y Javi estaba dispuesto a cuidar de nuestro futuro hijo. Pero era evidente que la noticia no podía llegar al instituto. Mis compañeras y demás profesores se enteraron de que yo estaba embarazada, y de que Javi iba a ser padre, pero no sabían que el padre era el profesor de Educación Física, ni mucho menos que eramos pareja. El bebé tenia fecha para el próximo mes de Octubre. Así que pasó el verano, yo y Javi lo disfrutamos mucho. Y yo continué estudiando, ya que pasé un extraordinario embarazo sin dolores, ni nauseas. Si algún día no iba al colegio Javi me ayudaba desde casa. 

El 14 de Octubre estaba yo en el instituto, me quedaba poquísimo para salir de cuentas, cuando empecé a notar dolores, así que salí fuera del instituto y me fui a casa. Llamé a Javi y le dije, que teníamos que ir al hospital, pues en casa rompí aguas. Javi no tardó nada, y nos fuimos al hospital. Y esa misma tarde llegó al mundo nuestra pequeña Ainara, nuestra princesita. 

Yo por supuesto que dejé el instituto para cuidar de ella, y Javi me ayudaba desde casa para conseguir terminar el curso. Cuando un día me dijo Javi que en el instituto querían conocer a mi pequeña, mis compañeras hablaban de que ya había dado a luz, y por supuesto sus compañeros (profesores) querían conocer también a Ainara. Así es que Javi quiso poner fin a nuestro gran secreto, y a la hora del recreo me presenté yo en el instituto, las profesoras y profesores vinieron enseguida a conocer a mi pequeña, y entonces vi que se acercaba Javi, con su sonrisa, y me quitó a Ainara de mis brazos, y le dió un beso... Ante tal estampa, se quedaron todos, muy extrañados y sorprendidos, y fue entonces cuando Javi les dijo que era nuestra hija, y que su novia era yo. Las caras de todos eran para fotografiarlas. Pero era hora de destapar el gran secreto. Y tengo que decir que estamos los 3 super felices y que dentro de 1 mes, nos vamos a casar. 

Con esto quiero decir, que la edad no importa, la edad esta en los corazones de cada uno, y en la madurez. Y soy madre con tan sólo 19 años, de una niña preciosa y super enamorada de Javi, que ahora tiene 30 años, y es todo un padrazo. 

!Un beso para todos los lectores, y en especial a ti, Ana!